¿Qué es Holi?: un festival más allá de los polvos de colores

Llevaba algún tiempo pensando en escribir una explicación sobre el festival de Holi, sobretodo por la proliferación de pseudo celebraciones, parties, eventos y demás que han surgido imitando algo que ni ellos mismos conocen. Y, una ex alumna de mis tiempos de maestra de escuela, compartió un video de dicho festival y las explicaciones que se daban eran risibles, imprecisas y muy lejos de lo que esta tradición entraña. Y eso me motivó a escribir este blog.
Voy a comenzar exponiendo que Holi es un festival netamente hinduista. Es una festividad que sale de las raíces y creencias religiosas del hinduismo. En la cosmología hinduista existen tres manifestaciones principales de la divinidad, cada una con sus diversas cualidades cósmicas, son representaciones o arquetipos de las cualidades de Aquello, del Absoluto, manifestadas como diversas fuerzas.
Una de estas manifestaciones se llama Vishnu, o el preservador de lo creado. Representa la fuerza universal que sostiene el orden de lo creado, que protege la creación y el balance para que haya armonía en el universo. Para el hinduismo Vishnu ha de manifestarse en diez formas diferentes (Dashavatar), en diversas eras de la humanidad, para proteger lo creado, proteger a las personas de fuerzas del mal y proteger a los devotos y personas religiosas o espirituales.
La festividad de Holi está intrínsecamente relacionada con la manifestación de Vishnu en su forma de Narasimha. Y aquí les voy a contar la leyenda abreviada…
Hubo una vez un rey llamado Hiranyakashipu que era muy soberbio. Hiranyakashipu se casó con una princesa de carácter noble, sencilla y afable llamada Kayadhu. En un momento los semidioses iban a raptar a Kayadhu, pero el sabio Narada supo de sus intenciones y se la llevó a su ashram o ermita. Kayadhu estaba embarazada y al estar en un ambiente espiritual, lleno de paz, armonía y amor, comenzó a realizar prácticas espirituales. Entonces, debido a la influencia de su práctica espiritual, su hijo nació con grandes tendencias espirituales. Este niño se llamó Prahlad.

Prahlad creció en la ermita, cantando día y noche el nombre de Hari (uno de los nombres de Vishnu). Cuando su padre Hiranyakashipu los busca en la ermita para que regresen al palacio el niño le dice que no hay nada más grande en el universo que Hari. El padre se puso rojo de furia y aquí comenzaron los problemas. Hiranyakashipu representa el ego y como tal su soberbia no tenía fin.
El rey quería que todo el reino le adorara como un dios y prohibió cualquier imagen, rito, himno, adoración o la mera mención del nombre de otro dios que no fuera él. Pero, su hijo solo decía el nombre de Hari y cantaba día y noche alabanzas a su nombre.
El rey ya estaba harto de que el niño no le obedeciera, que su propio hijo no le adorara como un dios y en múltiples ocasiones trató de asesinarlo, pero Vishnu siempre le protegía de todo mal, pues Prahlad era su más grande devoto. Un día el rey conspiró con su hermana, llamada Holika, para un nuevo atentado contra el niño. Holika tenía el poder de no quemarse en el fuego. Entonces crearon un plan para hacer una hoguera. Holika engañó al niño, lo sentó en su falda, encendieron la hoguera, pero el niño salió completamente ileso. Holika murió quemada y Vishnu un vez más salvó a su devoto.

El nombre Holi proviene de Holika. La festividad de Holi representa el triunfo del bien sobre el mal, de la luz sobre la oscuridad, del conocimiento sobre la ignorancia. En una región en particular de la India se asocia lo de los colores con una leyenda de Krishna, relacionando la festividad con bromas que Krishna le hacía a sus devotas las gopis y a su amada Radha. Esta modalidad se ha expandido pues las personas han hecho de la festividad una celebración más de pueblo, de un “compartir” sano y para festejar en las calles. Así como la Navidad se convirtió en una fiesta que dista mucho de su verdadero significado, asimismo ha sucedido en diversas tradiciones del mundo, pues las personas van dejando perder su real propósito. Así es que si algún día vas a una fiesta de Holi auspiciada por algún comercio o empresa ya sabes que de polvos de colores no trata…Hari Om, como diría Prahlad.